Así soy

Mi historia

A pesar de haber tenido una buena infancia y una familia que me quería, siempre fui una persona con baja autoestima, llena de sentimientos de auto rechazo, autoexigencia y culpa. A lo largo de mi vida me ha acompañado la falta de amor propio y la decepción, ya que nunca alcanzaba mis propias expectativas en ningún área de mi vida. No me sentía suficiente ni merecedora.

Nunca nada de lo que hiciera me hacía sentir verdaderamente plena o feliz conmigo y con mi vida.
Vivía mi vida hacia afuera, hacia lo que yo pensaba que esperaban los demás de mí o lo que yo entendía que debía hacer para ser como esas personas que yo creía que eran felices. No es de extrañar, que nada de lo que consiguiera, me hacía feliz. Ese vacío nunca se llenaba.

Y lo peor es, que no era ni siquiera consciente de porqué yo me sentía así, lo que me llevaba a sentirme culpable por no ser feliz. Era víctima de mí misma y de la vida que no sabía vivir siendo yo misma, estaba completamente desconectada de mi poder y mi esencia.

Con 25 años mi vida dio un giro de 180º cuando fui mamá por primera vez.
Me enseñó una nueva manera de amar que no conocía, me hizo crecer y madurar, ver la vida de otra manera, reconocer otras prioridades. Un par de años después ya estaba aquí mi segundo hijo y recuerdo esos intensos años con mucho amor y retos. Hasta que, con la llegada de mi tercer hijo, quien ha sido la pieza que completó nuestro puzzle y mi corazón, también nació una nueva Irene.

Fue un proceso de desarrollo personal brutal en el que fui experimentando un despertar tras otro (cada uno de ellos con su propio proceso)… Primero tuve un despertar social, al que le siguió un despertar religioso. Cuando no sabía dónde ir ni qué creer, tuve un despertar espiritual y por último, el gran despertar… El despertar de mi consciencia.

Ahí fui cuando por primera vez… me reencontré conmigo misma.

Nunca hubiese imaginado que el camino hacia mi interior me daría la llave a mi libertad: vivir mi vida para mí y no para los demás, escuchar mi intuición y lo que desea mi alma, encontrar mis respuestas, encontrar mi verdad, encontrar mi esencia y recuperar mi poder.

En toda esa introspección y búsqueda de mi coherencia interna mientras continuaba con mi formación, desarrollo y trabajo personal, el Coaching llegó a mí, y con él llegó mi reinvención profesional.

 Al formarme como coach de vida junto con la Inteligencia Emocional y la PNL (Programación Neurolingüística) mi consciencia se expandió a un siguiente nivel con el que ahora puedo llevar a otras personas a encontrar su propia sanación, su propia transformación, a vivir desde su esencia y poder interior.

Si yo he podido, tú también puedes.

Mis valores

Mi valor principal es la Energía. Somos energía y es la base de lo que enseño. Mi profesión me aporta energía a mí y a mis clientes ya que yo doy de mi energía y también recibo. La energía, al fin y al cabo es la que define mi vida, es movimiento, acción, abundancia, salud, plenitud, imparabilidad, resultados…

Otro valor esencial para mí es la Pasión - Soy una persona apasionada, no sé hacer las cosas a medias, lo vivo todo intensamente, por lo que la pasión es parte de mi esencia. Mi profesión también es mi pasión, con mi proyecto hago lo que amo y amo lo que hago. Eso es lo que me permite vivir con coherencia: ser, hacer y tener lo que siento, pienso y digo.

Crecimiento - Soy un ser que está en constante evolución, me encanta aprender y enseñar lo que aprendo, por lo que todo lo que hago, crece conmigo y es señal de que estoy avanzando, mejorando, dando y recibiendo. También, para mí crecer conlleva valentía, muy importante para mí, ya que el crecimiento ocurre cuando hay superación, cuando actúo a pesar del miedo, cuando me atrevo y estoy en el terreno de juego.

Excelencia - Es señal de estar en el buen camino. Me siento bien, útil, valiosa y capaz al dar mi máximo en cada etapa, por lo que ser excelente va de la mano del crecimiento y es sinónimo de flexibilidad, de estar abierta al cambio y de ir un paso más allá, de dar la milla extra y sentirme satisfecha con mi labor y contribución.

Diversión - Me encanta divertirme. Procuro que la diversión sea una parte importante en mi vida, en cada área. Aprender desde mi niña interior divirtiéndome y disfrutando. Divertirme al crear y transmitir mi mensaje me abre a la creatividad, a la ligereza, a transmitir las cosas de manera sencilla y desde el amor y así te resulte más ameno y fácil abrirte, conectar contigo misma, desde esa energía.

Mis pasiones

Como soy una persona apasionada, mi principal pasión es ¡VIVIR!

Me encanta todo lo que me aporta placer y satisfacción desde lo más grande hasta lo más pequeño, como disfrutar del olor a césped recién cortado, escuchar los pajaritos, una comida rica y saludable, ver a mis hijos disfrutar y oir sus risas, cerrar los ojos y disfrutar del sol en mi rostro (me da la vida), recargarme con su energía cada día, es de las mejores sensaciones de las que disfruto.

Pero también te diré que me apasiona tener un momento de absoluta paz conmigo, leer un libro, una taza de café… esas cosas simples, que me enamoran de la vida, me apasionan!

Una de mis pasiones desde que puedo recordar es Viajar! Conocer el mundo, sus maravillosos paisajes, naturaleza, obras de arte, su historia y diferentes culturas.

Otra de mis pasiones es mi profesión, soy una persona que llevo dentro la necesidad de aportar valor al mundo, por lo que me apasiona ayudar a las personas a tener más calidad de vida, una vida plena y con propósito alineado a su verdadera esencia.

Mi formación y experiencia profesional

Estudié y trabajé como auxiliar administrativa y como secretaria en España.

En Bélgica trabajé como encargada de un departamento en una tienda hasta que fui mamá.

Cuando mi tercer hijo tenía unos dos años, inicié un emprendimiento de salud holística.

En 2023 Me reinventé profesionalmente al convertirme en coach de vida, la profesión de la que estoy enamorada.

Mis formaciones también incluían, además de los diferentes tipos de coaching, como el coaching sistémico, coaching estratégico, otras ramas como son la Inteligencia Emocional y la Programación Neurolingüística (PNL). Desde entonces no he parado de formarme y lo seguiré haciendo a lo largo de toda mi vida, para dar cada vez más y mejor como persona y como profesional.

Además me he especializado como coach experta en Desarrollo Consciente, con lo que actualmente estoy ayudando a mis clientes en sus procesos de coaching a encontrar su propia esencia y transformación.

Curiosidades sobre mí